* Que se mueren casi todos en el IMSS
* Decepcionan sonorenses ante Covid-19
* El triunfo de Morena, está en el IEE
Por Jesús Ruiz Gámez
Dramático, por decir lo menos, lo comentado ayer por el senador y ex director general del IMSS Germán Martínez Cázares, en el sentido de que un 80% de los pacientes de Covid-19 que deben ser intubados en los hospitales del instituto, mueren.
En su colaboración en el programa de Ciro Gómez Leyva, dijo que las fuentes que aún mantiene en el IMSS le han confirmado ese porcentaje de mortandad en los espacios habilitados en los hospitales del IMSS, una situación que debiera ser investigada.
Martínez señaló que en los hospitales privados y en los de especialidades del sector público, como el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias, entre varios más, la tasa de mortalidad de los paciente intubados por coronavirus es prácticamente cero, mientras que en el IMSS “casi todos se mueren”.
Aunque durante su colaboración no le pudieron abundar al respecto, el Senador solamente mencionó como parte de esta situación los cientos de respiradores que el gobierno federal ha comprado a China.
Eso me trajo el recuerdo de que hace unas semanas le comentaba en esta columna la preocupación de algunos especialistas, porque la importación y eventual uso de los respiradores se estaba tomando muy a la ligera en el gobierno federal.
En pocas palabras advertían que el manejo adecuado de los respiradores requiere de cierto grado de especialización y era evidente que, por lo inesperado de la pandemia y el retraso con que reaccionó el gobierno, no habría el suficiente personal capacitado para ello.
De hecho, recuerdo que señalaban el riesgo para los pacientes por que personal no capacitado coloque y maneje estos respiradores, además de que el funcionamiento de esos aparatos varía según las marcas y países de origen.
No quiere decir esto que los respiradores chinos sean de mala calidad, de hecho nadie lo ha comentado, pero está claro que muchos de esos aparatos están siendo puestos en manos de personal que quizás nunca los ha conocido.
¿Y sabe qué es lo peor de todo esto? Pues que la mayor parte de los derechohabientes del IMSS entran en esa categoría de pueblo pobre que el gobierno de López Obrador dice tanto querer y proteger.
La información debería servir para que todos los que tienen servicios del IMSS sepan que, si se contagian y necesitan ser intubados en un hospital del Instituto, hay una alta probabilidad de que no salgan con vida.
DECEPCIONAN LOS SONORENSES
A lo mejor puede parecer mal que lo escriba, pero la verdad yo siempre pensé que los sonorenses, como población que está supuestamente entre las mejor educadas del país, íbamos a tener una actitud diferente a la indolencia e irresponsabilidad que se observa en estados del centro del país.
Reconozco con vergüenza que me equivoqué al creer que en eso sí seríamos más chingones, más responsables para cuidarnos a nosotros mismos y a nuestras familias.
Ayer la gobernadora Pavlovich advirtió que en Sonora se está registrando una movilidad superior al 60%, por lo que reiteró el llamado a la solidaridad y a la fuerza de voluntad de los sonorenses para revertir el crecimiento acelerado de la pandemia por el Covid-19.
La Gober está preocupada porque esta actitud se observa de cara a los ya próximos días en que se se dará la reactivación económica en la entidad y si seguimos así habrá un fuerte impacto en la salud de la población.
Ha dicho la Mandataria que, así se le haga la boca chueca de tanto decirlo, seguirá insistiendo para que reflexionemos y rescatemos ese sentido de responsabilidad, para lo cual ayer dirigió otro mensaje a través de redes sociales, pues pareciera que los sonorenses están interpretando que el regreso paulatino a la “nueva normalidad”, es como una autorización para hacer todo lo que se hacía antes.
Estamos en lo peor de la pandemia en cuanto a riesgo de contagios y muertes (en una semana se nos dispararon 73% los contagios y 66% las muertes, dijo la Mandataria), pero aun así más gente se ha lanzado a las calles y a sitios de recreación.
Pavlovich comentó que, desafortunadamente, todos los pronósticos de los expertos se han cumplido, con un dramático aumento de contagios y muertes asociadas al relajamiento en las medidas de distanciamiento social, ocasionando ya saturación en hospitales del estado.
Y pensar que muchos de esos que desprecian el peligro de exponerse al contagio, irán a parar a hospitales del IMSS donde, según su ex director, ocho de cada diez que se ponen graves, fallecen.
¿MORENA EN CONTROL DEL IEE?
Al confirmarse que el proyecto de reforma electoral quedó sepultado por la fuerza que pudieron demostrar los operadores del Partido Morena en y ante el Congreso del Estado, me queda claro que el principal triunfo de los morenistas y de quienes sean sus candidatos en el 2021 será conservar el mayor grado de control o de afinidades en el Instituto Estatal Electoral (IEE).
El fallido intento de reforma impulsado principalmente por el PAN y el PRI, dejó fuera la posibilidad de hacer menos onerosas las campañas por la gubernatura, pues se proponía reducir sus tiempos, así como permitir más espacios de participación a los candidatos independientes.
Pero ese y otros temas no fueron los que realmente ocuparon la atención de Morena, sino que su principal lamento fue contra las pretendidas modificaciones a la estructura orgánica y legal del IEE.
Los de Morena inmediatamente dieron señal clara de que se sentían afectados por la posibilidad de esas modificaciones en el órgano electoral, lo que a su vez dejó ver que tenían algo que perder y que ahora podrán conservar al impedir la reforma.
Ayer, el presidente de la Comisión de Gobernación y Puntos Constitucionales, Jesús Alonso Montes Piña, informó que al romperse el consenso se decidió retirar el dictamen y es así que ya no será presentado hoy jueves en la sesión ordinaria, luego de que “los intereses de una fuerza política (Morena) acostumbrada a la polarización nos condujo de manera irresponsable a la paralización de la reforma electoral, aún en contra del mandato previsto en la Constitución Federal”.
Sólo como dato le recuerdo que la fecha límite para esta reforma es el 31 de mayo.
Con esta victoria ¿logra Morena conservar inclinada a su favor la balanza en el árbitro electoral? Todo indica que sí, aunque todavía estamos a un año de la elección y en ese tiempo todo puede pasar.
Y VAN POR EL INE
Esto de que los partidos buscan hacerse del control de los órganos electorales no es nuevo ni es privativo de un solo partidos: todos, en diferentes momentos y circunstancias le han hecho la lucha por lograrlo.
Para nadie es secreto que el gobierno de López Obrador tiene fija su mira en el Instituto Nacional Electoral (INE) y muestra de ello es la más reciente jugada de modificar el marco legal –nomás por sus pistolas– para que la Secretaría de Economía pueda regular la organización de las elecciones, so pretexto de que en ese trabajo también debe vigilarse que se cumplan normas de calidad.
Más allá de lo aberrante de la propuesta, ya que el INE nada tiene que ver con cuestiones de la economía, esta acción se trata de una muestra más del “modito” con que López Obrador busca deshacerse de los contrapesos y hacerse del control de todo el espectro de la política y del gobierno.
La verdad es que en el gobierno de la 4T saben que esta nueva intentona para meterse con todo en el INE no tiene futuro en lo legal, pues claramente es inconstitucional, pero bien sirve como distractor sobre otros temas y además da material para el golpeteo politiquero contra los consejeros electorales que tanto le gusta al Presidente.
Que es un despropósito, como dice el consejero Ciro Murayama, claro que lo es, pero de que tiene un propósito claro, eso es más transparente que el agua.
