SK Broadband, un proveedor de Internet coreano, dice que el tráfico de espectadores de Netflix le ha generado mayores costos en la red y más trabajos de mantenimiento debido a la transmisión de la exitosa serie el Juego del Calamar, por lo que han decidido entablar una demanda en su contra.
Con esto pretenden que la empresa de streaming haga un aporte para sostener el sistema que da sustento técnico a la distribución de contenido de las plataformas.
La medida se produce después de que un tribunal de Seúl dijera que Netflix debería “razonablemente” dar algo a cambio a los proveedores de servicios de Internet por el uso de la red, y varios legisladores surcoreanos se han pronunciado en contra de los proveedores de contenido que no pagan por el uso de la red, a pesar de generar un tráfico que calificaron como “explosivo”.
Netflix respondió que analizará el reclamo de SK Broadband y que buscarán canales de diálogo para explorar un acuerdo con SK Broadband y otras operadoras para garantizar que los clientes no se vean afectados, publica Reuters.
La popularidad de la exitosa serie “Squid Game” (El Juego del Calamar) y otros lanzamientos han llevado a Netflix a ser el segundo generador de tráfico de datos más grande del país después de YouTube. Ni Google ni Netflix pagan tarifas por el uso de la red, algo que sí hacen otros proveedores de contenido, como Amazon, Apple y Facebook, dice SK.
El tráfico de datos de Netflix manejado por SK aumentó 24 veces desde mayo de 2018 a 1,2 billones de bits de datos procesados por segundo en septiembre de 2021, según SK. Todo gracias al éxito de varias producciones de Netflix generadas en Corea, como “Squid Game” y “D.P.”.
SK Broadband confirmó este 1 de octubre que presentó la demanda contra Netflix para que la plataforma más exitosa del mundo pague por el uso de las redes de SK desde que comenzó a usar una línea dedicada, algo que comenzó en 2018 para poder ofrecer cantidades cada vez mayores de contenido de video de alta definición.
En 2020, Netflix también había presentado una demanda contra SK aludiendo que no tenía ninguna obligación de pagar por el uso de la red, argumentando que el deber de Netflix termina con la creación de contenido y dejarlo accesible para los espectadores.
Netflix dijo que los gastos de SK son parte de sus obligaciones contractuales.