Mientras el gobernador Durazo entregaba más de mil bases de trabajo
a personal de salud, otros doscientos del área de enfermería se
manifestaron para exigir mejores condiciones laborales.
Al mismo tiempo en que el gobernador del estado entregaba más de mil bases a personal del sector salud que trabajaba bajo contrato, alrededor de doscientas enfermeras y enfermeros se manifestaron en el Hospital General de Especialidades para exigir se les tome en cuenta también para ser basificados, recibir mejores sueldos y contar con servicio de seguridad social.
Por unos momentos bloquearon el tráfico en el bulevar Colosio, hasta que fueron atendidos por el propio gobernador Alfonso Durazo, quien les prometió revisar su caso: “Queremos hacer las cosas bien… lo vamos a ver, se va a basificar a todos”, dijo.
Momentos antes, en el mismo hospital el gobernador había encabezado la ceremonia de entrega de bases a 1,018 trabajadores del sector salud en Sonora, siendo ellos 703 enfermeras y enfermeros, 112 médicos, 203 del área de psicología, nutrición, químicas y químicos, trabajo social, técnicas y técnicos en radiología y terapistas físicos, todos con varios años laborando mediante contratos eventuales e interinatos.
En el mismo evento se inauguró la primera sala de hemodinamia en la entidad y se develó una placa que señala la transferencia de los servicios estatales de salud al sistema IMSS-Bienestar.
En cuanto a la sala de hemodinamia, se informó que este servicio se fortaleció además con personal médico especialista en cardiología intervencionista y anestesiología, así como enfermería, técnicos radiólogos y personal auxiliar (camilleros).