Vergonzoso: la ABC y la abulia
Julio César Márquez, uno de los padres afectados por el incendio de la guardería ABC, que cobró la vida de 49 inocentes, está llamando al Congreso del Estado para que éste a su vez pida al Ejecutivo le remita el reglamento de la llamada Ley 5 de Junio, emitida precisamente para evitar tragedias similares.
Los que en este sexenio de paladines anticorrupción apostaban por la propuesta del diputado David Palafox para clasificar como graves (no menores, como hasta hoy) los delitos cometidos por funcionarios públicos, vayan jalando poltronas y catres, porque ahí los van a hallar.
La catástrofe de la ABC, tan lastimosa incluso a nivel mundial y con la que tantos políticos se dieron golpes de pecho, ocurrió el 5 de junio del 2009 y es hora de que, ¡siete años después!, el reglamento viene a lomo de burro.
Se entiende que haya pasado el sexenio de Guillermo Padrés a la luz de que todo le valió gorro, pero ya corrió un año del nuevo gobierno y tampoco se les ve apuro. No habla muy bien de quienes tengan a su cargo dicha tarea…
Las cuentas mochas
El vocero de la Fiscalía Anticorrupción del Estado dice que a la fecha se han practicado 4 mil 229 diligencias con cerca de 553 comparecencias de los que ya se pelaron –perdón, de los investigados del sexenio de Padrés-, entre ex secretarios y directores generales, principalmente.
En contra, los correteados han interpuesto 189 juicios de amparo, de los cuales la Fiscalía ya ganó 42 y se entiende que los demás están en veremos.
No se puede negar que los números lucen impresionantes, como pasa con los del Contralor Miguel Ángel Murillo, su liacho de inhabilitaciones y su sueño guajiro – porque hasta la fecha, aún en la rica tradición porcícola de Sonora, no se ha visto que un cochi suelte una mazorca- de recuperar carretadas del dinero malhabido, pero a un año de mangonear la tarraya, es hora de que el respetable público sólo ve en el “bote” a Jorge Morales, el ex de Comunicación Social, mientras “Pancho Platas” y Héctor Ortiz Ciscomani siguen defendiéndose a manotazos, vía fianzas millonarias.
A sólo unos días de que la gobernadora Claudia Pavlovich rinda su primer informe de gobierno, más les vale hacer bueno lo que han venido pregonando: que se han tardado en arponear peces gordos porque las cosas están haciéndose en serio y concienzudamente, precisamente para no quedar en ridículo.
Porque de lo contrario, la cacareada batida anticorrupción terminará como aquél cuento del parto de los montes, que después de un ruidajo parieron un ratoncito…
Esos paleros…
El Centro de Investigación Económica y Presupuestaria alertó ante los senadores que el próximo año podría dejarse venir otro gasolinazo de casi 1.97 pesos por litro. Así, la Magna llegaría a 15.45 pesos y la Premium hasta 16.78
Cuando este tipo de “investigadores” y asesores entregan sus sesudos estudios a nuestros insignes legisladores, más parecen enviados gubernamentales que analistas independientes. Tienden la cama, pues, para que luego salgan los otros con su batea de babas y nos asesten impunemente otro garrotazo, bajo el echeverriaco argumento de que el ajuste “es doloroso, pero necesario”.
De plano, de sexenio a sexenio sólo cambian los monos, no la política de sacar todo del lomo de la gente…
Un gandalla en el PRI
Enrique Ochoa Reza, el hoy dirigente nacional del PRI, presentó ante el presidente Peña Nieto su renuncia como Director General de la CFE el pasado 8 de julio, día en que por “separación voluntaria” del hueso le dieron 213 mil 565 pesos, por concepto de nómina. Pero ahora se supo que un día después, el señor se embolsó sin pudor alguno un millón 725 mil por el concepto de “liquidación por separación”.
Del artero agandalle, el flamante pastor priista no dijo nada ni explicó nada, en una especie de apego a la mexicana regla de “lo cáido, cáido” y vayan y vengan chifletas, lo cual no obsta para preguntarse: ¿piensa Peña Nieto que con este amiguito – además tiene cara de que no pela un chango a nalgadas- al frente de su partido retendrá la Presidencia el 2018? ¿Qué bandera enarbolará este manotas para convencer a la gente de que los priistas sí saben gobernar (y meter la mano al erario)?
Vistas así las cosas y con el país de picada, no andan muy errados los que le apuestan a otra transición, ya sea a través de un panista-panista o de un panista-priista campechaneado, como el flamante titular de Hacienda, José Antonio Meade, que ya trabajó antes con Felipe Calderón Hinojosa.
Cualquiera, pues, y bien pactado entre PRI y PAN con tal de que no llegue el birolo de Macuspana, que entre tanto despiporre nomás se frota las manitas repitiendo que “la tercera es la vencida”. Total, ya no sabe uno si reír o ponerse a llorar.
El pisa dólares
La semana pasada, la columna Entre Nos, de Mr. X en el diario Expreso reseñó:
“Cuentan que ayer se dio una reunión del dirigente del Sindicato de Trabajadores de la Universidad Estatal de Sonora con profesores de la Unidad Académica Hermosillo, porque la queja es que el rector Horacio Huerta Cevallos y el secretario general académico, Guillermo Gaxiola, tienen detenidas las gestiones y actividades para fortalecer, precisamente, el área académica”.
Hasta ahí el comentario, donde además se habla de su eventual salida del cargo por tanto cajeteo, pero surgen las naturales dudas:
¿Por qué será que en cuanto hueso burocrático pepena Huerta Cevallos, pa’ pronto se agarra del chongo con los trabajadores? ¿Lo poseerá algún espíritu de cacique patronal, o un complejo por no tener la estatura político-económica del mecenas que lo columpia de una liana a otra, como para ningunear al que se le atraviese?
Vaya usted a saber, pero desde hace rato trae ruido a su alrededor, y ya se sabe que cuando el río suena es porque trae piedras. Allá por el 2006, fue rector en la Universidad Tecnológica de Hermosillo y el sindicato de trabajadores de ésta lo acusó de haber dejado irregularidades por diez millones de pesos. A Huerta Cevallos se le resbaló, como se le resbaló lo publicado el viernes 15 de agosto del 2008 en la misma columna de Mr. X. bajo el encabezado “Que hubo fiesta”:
“Donde dicen que se pusieron de fiesta fue en la Universidad Tecnológica de Hermosillo (UTH) con la salida de Horacio Huerta Cevallos de la subsecretaría de Educación Media Superior y Superior, quien también fue rector de esa institución.
El cuerpo de profesores de la UTH recuerda cómo Huerta Cevallos benefició al personal de confianza y dicen que olvidó a los sindicalizados y a los maestros de horas sueltas”.
Ídem anterior: hasta aquí Mr. X. Vaya usted a saber qué pasa en realidad, pero quienes lo conocen dan dos pistas interesantes para interpretarlo: dicen que cuando camina parece que pisa dólares (vulgo: se marea en un ladrillo) y que la oreja se le llena de melcocha y su trato se vuelve de dama fina cuando se dirigen a él llamándolo “Doctor”…cuando en estricto apego a la verdad es Médico Veterinario Zootecnista por la UNAM.
Nada qué ver con otros doctorados académicos, pues. Pero si a él le suena bonito, déjenlo que se dé su gusto. A lo mejor por eso trata a sus subordinados como los trata, qué caray.
Una letra por otra
La prensa nacional dio cuenta también de que el coordinador del PRI en la Cámara de Diputados, César Camacho Quiroz, encabezó la “rodada” de más de 40 legisladores de su partido, para conmemorar el Día Mundial sin Auto. Los próceres de la patria dejaron sus camionetas y coches para subirse a las bicicletas.
Ya era hora de una corrección gramatical. Porque los señores legisladores (no sólo los del PRI) tienen rato encabezando “la robada”.