Nogales, Son, 01 de Febrero del 2017.- Las 34 estaciones expendedoras de gasolinas cerrarán sus operaciones si el gobierno federal no aplica un precio especial competitivo a los combustibles en las ciudades fronterizas del país, especialmente en Nogales.
El presidente municipal, Temo Galindo Delgado, junto con los propietarios y representantes de los gasolineros, así como los dirigentes de las cámaras de la industria, el comercio y prestadores de servicio dieron a conocer que en virtud de la negativa de la federación de hacer efectivo el decreto que homologa los costos de los hidrocarburos con las ciudades fronterizas estadounidenses, se determinó dejar de vender gasolinas del lado mexicano hasta que no se dé una solución a esta problemática.
Derivado de las medidas que tomó el Gobierno Federal en torno a subir los precios de los combustibles en todo el país, el caso de Nogales dejó de ser una ciudad competitiva en materia de comercialización de los carburantes para convertirse en la más cara en todo el estado de Sonora.
Ante esta situación, los dueños de las 34 estaciones que operan en esta frontera, decidieron cerrar la venta de estos combustibles como medida de presión para que le federación aplique el subsidio que por decreto le corresponde a esta localidad y a las demás de la franja fronteriza, dijo Nora Lily Galindo López, vocera del gremio.
El Alcalde, reiteró su compromiso de seguir empujando acciones para que, tanto PEMEX, como Hacienda y Regulación de Precios en el país, apliquen otras medidas menos dañinas para la economía de los ciudadanos, de la industria, comercio, el transporte y otros rubros que son afectados por el alza de los hidrocarburos.
Apoyados por todos los sectores organizados de la población, el gremio de los gasolineros expusieron que la federación intenta que los expendedores de combustibles compren caro y vendan barato, lo cual ocasionaría el caos y la quiebra de todas las estaciones expendedoras.
“Es una estrategia disfrazada de supuesto beneficio para todos, porque el Gobierno Federal pide que el comercializador de gasolinas absorba el incentivo para vender más barato y luego se los regresará 40 días después de un modo bastante complicado y sin ninguna seguridad, situación que no nos conviene a nadie, ni a los ciudadanos comunes, dijo Galindo López.
Ejemplificó que este método sugiere que en el caso de la gasolina Magna que cuesta 16 pesos, los expendedores la vendan a 13 y luego devolverles esos tres pesos de diferencia mediante un modelo que hasta ahorita no se entiende.
El dirigente de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra), Hipólito Sedano, afirmó que solo se está esperando respuesta de las autoridades de Hacienda para realizar el cierre de las estaciones de combustible en toda la ciudad, sin que se especifique por cuánto tiempo, pero sin afectar a los consumidores.
Aseguró que derivado del alza de los hidrocarburos, los expendedores nogalenses, han perdido entre 70 y 80 por ciento de sus clientes que prefieren ir a consumir a Estados Unidos que en Nogales, Sonora porque les resulta más barato, a pesar de la paridad del peso-dólar.
Temo Galindo por su parte, destacó que él ha sido el único presidente municipal que se ha manifestado en contra del llamado “gasolinazo”, además de impulsar acciones de presión para que la federación aplique el precio homologado en la frontera con Estados Unidos.
Además manifestó su total respaldo a los movimientos que se están haciendo en forma pacífica en Nogales a fin de que se dé un precio justo a los combustibles, porque, no solo afecta a la industria y al comercio, sino a toda la población en general debido a que el aumento del costo de las gasolinas propicia una escalada de alza de los precios de muchos productos y servicios.
