Agustín Carstens no dejará el Banco de México (Banxico) el primero de julio, como se tenía previsto, pues el presidente Enrique Peña Nieto le pidió que se quedara hasta noviembre.
La información trascendió en redes sociales pero luego fue confirmada por el Banxico, no así el Banco de Pagos Internacionales (Bis, por sus siglas en inglés), cuya gerencia habría de ocupar Carstens en julio.
Como se recordará, el pasado 1 de diciembre, el Banxico y el Bis habían anunciado que Agustín Carstens aceptó ser el gerente general del llamado banco de bancos centrales en sustitución de Jaime Caruana, con lo cual sería la primera vez que un banquero central de una economía emergente, como es México, ocupe esa elevada posición.
El comité de nominación del Bis, que preside Jens Weidmann, integrado por los gobernadores del banco de Inglaterra, Mark Carney; el del Banco Central Europeo, Mario Draghi; el de Japón, Haruhiko Kuroda; el de Francia, Francois Villeroy de Galhau; de Italia, Ignazio Visco y de la reserva Federal de Estados Unidos, Janet Yellen, había elegido a Carstens como su nuevo gerente general a partir de primero de octubre.
El BIS es la institución financiera internacional más antigua del mundo, fundada en mayo de 1930 y asiste a los bancos centrales en la promoción de la estabilidad monetaria y financiera global. Se le reconoce como el espacio idóneo para el análisis, la renovación y el perfeccionamiento de la regulación bancaria global, estableciendo acuerdos que han propiciado y fortalecido la estabilidad financiera en el mundo de los propios bancos centrales, y como agente o fideicomisario en operaciones financieras.
