La escasez de píldoras anticonceptivas y preservativos en las farmacias y hospitales de Venezuela podría generar una eventual epidemia de enfermedades de transmisión sexual, alertó un especialista.
“Esta situación, aparte de afectar la vida íntima de las parejas, las expone a contraer enfermedades infecto-contagiosas, como el VIH-Sida”, precisó el doctor Aníbal Seijas, director de una clínica privada del este de Caracas.
En diálogo con Notimex, dijo que aunque en Venezuela no existen estudios oficiales recientes que permitan conocer la real situación del virus de inmunodeficiencia humana (SIDA), se estima que anualmente unas 25 mil personas contraen la enfermedad.
Asimismo, dijo que la ausencia de medios para controlar la reproducción potencia el riesgo de embarazos no deseados, es decir, el derecho que tiene la mujer venezolana a decidir si quieren o no tener hijos.
Aclaró que esta situación se desarrolla en el contexto de un fuerte desabastecimiento general de fármacos, rubro en el cual se incluyen los anticonceptivos, que ya llega al 85 por ciento, según fuentes de la Federación Farmacéutica de Venezuela (FFV).
“La falta de anticonceptivos y condones hizo disparar las alarmas en un país que, según el Banco Mundial (BM), registró en 2012 la quinta tasa más alta de embarazo entre adolescentes, en 21 países latinoamericanos”, indicó el especialista.
Asimismo, refirió que la fábrica socialista de preservativos, inaugurada hace cuatro años por el presidente Nicolás Maduro, no ha producido el primer condón por falta de materia prima (latex), motivo por el cual esa planta se encuentra paralizada.
“Para contrarrestar esta ausencia de condones y anticonceptivos muchas damas han optado por aplicarse ácido acético en sus genitales antes del coito, método que las abuelas conocieron con el nombre de ‘espermaticida’ y con el cual evitaban quedar embarazadas”, señaló.
Distintos encargados de farmacias privadas informaron a Notimex que la distribución de condones y anticonceptivos comenzó a hacerse irregular desde mediados de 2014, pero que a partir de 2015 esta situación se agudizó y los preservativos desaparecieron.
