Windows 10 decidió colocar a Edge como su navegador predeterminado para atraer el gusto de sus usuarios, pero no esperaba que la mayoría abandonara al sucesor de Internet Explorer.
Información del sitio Stat Counter, que rastrea qué navegadores está usando la gente para entrar a internet, mostró que a final de julio –cuando la nueva versión del sistema operativo fue lanzada–, el 20% de los usuarios de Windows 10 usaban Edge.
Sin embargo para finales de agosto la cifra cayó a 14% y los clientes prefirieron migrar a Mozilla Firefox y a Google Chrome, según el sitio cuyos datos son citados por el portal Business Insider.
Pese a que Windows lleva poco tiempo en el mercado, la compañía ha señalado que ya se encuentra en 75 millones de dispositivos, por lo que el bajo uso de Edge puede ser un motivo de preocupación para la empresa, sobre todo por los usuarios que parecen haberlo usado y después descartado.
