Para Andrés Manuel López Obrador, México necesita una revolución moral y por ello propone la creación de una Constitución Moral.
Aliado ya con el partido Encuentro Social (PES), el líder de Morena aseguró que una nueva constitución estaría encaminada a “fortalecer una convivencia futura sustentada en el amor para alcanzar la verdadera felicidad”.
“Debemos convencer de la necesidad de impulsar cambios éticos para transformar a México. Solo así podremos hacer frente a la mancha negra del individualismo, la codicia y el odio, que nos ha llevado a la degradación progresiva como sociedad y como nación”, dijo AMLO.
Propuso que, en caso de lograr la victoria el 1 de julio, se convoque a una Constituyente, en la que participen especialistas, como filósofos, psicólogos, antropólogos y “todos aquellos que tengan algo que aportar al respecto”. “Ancianos venerables de las comunidades indígenas, jóvenes, empresarios, diálogo ecuménico, interreligioso, entre creyentes y no creyentes. Diálogo para moralizar a México”.
Después de que el dirigente de Encuentro Social, Hugo Éric Flores, lo calificara como el nuevo Caleb que camina hacia la conquista del Monte Hebrón, López Obrador incidió en que “la meta última de la política es lograr el amor y hacer el bien, porque en ello radica la verdadera felicidad”.
El aspirante presidencial citó también el Nuevo Testamento, donde, dijo “se señala que Jesús manifestó con sus palabras y sus obras su preferencia por los pobres y los niños. Y para muchos, Cristo es amor”. López Obrador aseguró que su concepción del Estado laico no está reñido con estos planteamientos. “Jesús fue muy claro, fue el primero que expresó: “A Dios lo que es de Dios y al césar lo que es del césar”.
La alianza entre Encuentro Social y Morena ha estado repleta de polémica después de que López Obrador avalara el acuerdo en diciembre, apenas seis meses después de asegurar que nunca pactaría con la organización.