La delegación de la PGR en Sonora investigará a un testigo que incrimina a Guillermo Padrés Elías, pues declaró haber participado en una reunión con el padre del ex Gobernador de Sonora, pese a que éste había muerto ocho años atrás.
La carpeta de investigación fue iniciada por el delito de falsedad de declaración en contra de Miguel Ángel Arriola Cruz, un fabricante de uniformes que supuestamente fungía como prestanombres de Mario Aguirre Ibarra, empresario textilero y contratista del Gobierno de Padrés.
Arriola declaró a la PGR que en 2010 Aguirre se reunió con Miguel Padrés Durán, padre del ex Gobernador, para organizar el acondicionamiento de las bodegas donde se montaron las fábricas que proveerían al Gobierno estatal de uniformes escolares.
“Se le pagaban los uniformes completos a Mario Aguirre Ibarra y este únicamente entregaba una pequeña cantidad de los suéteres contraviniendo las condiciones de los contratos que les fueron adjudicados”, dice Arriola.
En el sexenio de Padrés, las empresas de Aguirre recibieron contratos por más de mil 160 millones de pesos, tanto las que estaban a su nombre como las registradas a nombre de Arriola.
Información de Abel Barajas/REFORMA
