Ante la noticia de despidos masivos de empleados del Sistema de Administración Tributaria (SAT) en varios estados del país, el presidente Andrés Manuel López Obrador, reaccionó y prometió revisar esas situaciones.
En su conferencia de prensa matutina, López Obrador insistió en que los derechos de trabajadores de base y sindicalizados están a salvo, pero los trabajadores que han denunciado su despido son de confianza.
“Lo voy a revisar. Se están respetando los derechos de los trabajadores de base, de los trabajadores sindicalizados”, dijo tras insistir en que su propuesta de austeridad está enfocada en recortar puestos de la alta burocracia. “Ya hemos dicho que el ajuste es arriba. Entonces voy a revisar este tema, lo voy a hacer”, prometió.
Como se informó ayer sobre el caso particular de Veracruz, donde empleados de las oficinas del SAT en Córdoba y Tuxpan fueron despedidos en forma masiva por funcionarios de la Ciudad de México quienes adujeron la radical medida a “ajustes y reducciones presupuestales” de la nueva administración de López Obrador.
En el caso de Tuxpan, la presión sobre 150 empleados fue más radical, pues se les exigió firmar su renuncia o no se les permitiría salir de la oficina. Casos similares se reportaron en otras entidades del país como Guanajuato, Guerrero, Jalisco, Sonora y la Ciudad de México, a quienes se les notificó mediante circular que por órdenes del gobierno federal terminaba su contrato.
En redes sociales, empleados del SAT en varias entidades han denunciado despidos o presiones para que renuncien a sus empleos.
