En un año la tasa de ocupación laboral de la población infantil mexicana aumentó del 7.6% al 8.4% -según Inegi-. Esto significa un total de 2 millones 475 mil 989 menores en el país, aunque según reportes de la UNAM, la cifra rebasa los tres millones.
En el marco del Día contra el trabajo infantil se revela que el 89.6% de los infantes que laboran realizan actividades no permitidas, 37% no asisten a la escuela, 42.5% no reciben ingresos y 28.8% perciben hasta un salario mínimo.
Los niños de cinco a once años no deberían realizar ningún tipo de actividad laboral; mientras que de doce a catorce años solamente deberían hacer trabajos ligeros que no perjudiquen su salud o desarrollo y no impidan su asistencia escolar, según la 18a Conferencia Internacional de Estadísticos del Trabajo.
La Ley Federal del Trabajo indica en su artículo 177 que la jornada de los menores de 16 años no puede exceder las seis horas diarias y deberá dividirse en periodos máximos de tres horas.
Los datos indican que el 27.5% de las niñas y niños en ocupación no permitida laboran hasta 14 horas a la semana, 24.7% trabaja más de 14 a 36 horas y 27.1% sobrepasa 36 horas.
Los tres estados con mayor población de niñas, niños y adolescentes que trabajan son el Estado de México, con 286.153 (11.55%); Jalisco, con 220.116 (8.89%), y Puebla, con 208.450 (8.41%).
Del total de menores que laboran en nuestro país, 69.8% son niños y 30.2% son niñas.
30.2% de los niños y niñas trabajan en actividades agrícolas, ganaderas, forestales, caza y pesca, 23.2% son trabajadores de apoyo en la minería, construcción e industria.
Por su parte detalla el INEGI, que existen 1 millón 686 mil 740 menores que realizan labores domésticas en condiciones no adecuadas, es decir que ponen en riesgo su salud o desarrollo. En este aspecto 6 de cada 100 mujeres de cinco a diecisiete años de edad emplean más tiempo realizando estas tareas y el 29.7% de éstas excede las 28 horas a la semana.