Un grupo de mujeres se manifestó en contra del protocolo para la prevención y atención a casos de violencia de género en la Universidad de Sonora, y tomaron por una hora las instalaciones de rectoría al cerrar la entrada principal.
Las mantas y letreros colocados hacían alusión que para la elaboración del protocolo aprobado el 31 de octubre pasado, no se tomó en cuenta la opinión de las víctimas y que éste protege al agresor.
Expresaron que se trata de un documento que se hizo para apaciguar el enojo por la actuación de las autoridades universitarias y la revictimización de las estudiantes que denuncian.