*Muertes en calles y banquetas, escenario posible en Sonora
*Ante medidas más estrictas, existe el amparo
*Comités de Defensa de la 4T, se anticipa la represión
Por Jesús Ruiz Gámez
Muchas quejas originaron las nuevas medidas restrictivas emitidas por el Ayuntamiento de Hermosillo, pues se dan en un momento en que los capitalinos han soltado amarras y se hace evidente la decisión de salir a las calles “a ver qué pasa”.
No queda duda de la buena intención de la alcaldesa Célida López Cárdenas, quien, como ella misma dice, eligió no hacerse tonta frente al escenario de extrema gravedad que se nos viene encima y su gobierno hará lo posible para minimizar la movilidad, con todo y que sus decisiones sean impopulares.
Hay que señalar que la decisión de la Alcaldesa y su equipo se da a contracorriente del mensaje del presidente López Obrador, quien de manera insensata e irresponsable hace lo contrario, al incitar a los mexicanos a que dejen el confinamiento y salgan nuevamente a hacer una vida normal, lo cual equivale a decir a la gente que salgan a las calles en pleno bombardeo.
Pero la verdad no creo que las nuevas medidas detengan en los hemosillenses la propensión a socializar y, en una gran parte, su personal decisión de asumir los riesgos por la necesidad de regresar a producir dinero para sustentar las necesidades familiares.
Estoy convencido que el único sentimiento que puede detener la decisión de abandonar el aislamiento social es el miedo y las medidas del Ayuntamiento no lo crean.
Me parece que será la repetición de más y más escenas como las de ayer, las que harán que una buena parte de los capitalinos vuelvan a refugiarse en sus casas.
Ayer ocurrió un choque automovilístico al parecer ocasionado por una dama que desesperadamente buscaba atención médica en hospitales particulares, al presentar síntomas de probable Covid-19.
La mujer no encontraba dónde la atendieran pues en los hospitales privados ya no había cupo. Finalmente fue trasladada a un hospital público y ya es atendida.
Por otra parte, el director general de Atención Especializada y Hospitalaria de la Secretaría de Salud, el doctor Héctor Clemente Baltierra, informó que los hospitales Covid en Sonora se encuentran ya con alrededor del 80% de su capacidad ocupada y hasta el fin de semana quedaban unas 200 camas por ocuparse en todo el estado, entre instituciones estatales y federales.
El mismo funcionario ya advertía que los hospitales privados en Hermosillo estaban saturados, así como el Hospital Fernando Ocaranza, del Issste, y el Hospital Ignacio Chávez, del Isssteson.
Esta saturación significa que los sonorenses estamos recogiendo lo que sembramos, luego de que una gran parte de los ciudadanos ha hecho caso omiso de los llamados a no exponerse al contagio.
En pocas palabras, estamos ya en la puerta de ese funesto escenario en que decenas o quizás cientos de sonorenses no puedan ser atendidos y mueran prácticamente en las calles y banquetas, un escenario advertido incontables veces pero que mucha gente no creyó posible.
Ojalá que no lleguemos a tal escenario, pero las imágenes de miles de personas conviviendo y movilizándose el pasado fin de semana hacen que sí sea muy probable dentro de unos días o unas cuantas semanas.
Y será hasta entonces cuando a los escépticos, a los incrédulos y a los irresponsables, les llegue ese sentimiento de miedo que los hará correr a esconderse.
Ni modo, así somos.
ILEGAL, PERO NECESARIO…
Sobre este asunto de las nuevas medidas del Ayuntamiento de Hermosillo, el presidente de la Barra Sonorense de Abogados, Héctor Contreras Pérez, emitió opinión en el sentido de que carece de sustento legal ya que la Comuna no tiene facultades para decretar disposiciones en materia de salud ni para restringir el libre tránsito.
Sin embargo, el presidente del Supremo Tribunal de Justicia del Estado, el magistrado Francisco Gutiérrez Rodríguez, opinó que aunque dichas medidas sí pudieran incurrir en ilegalidad, deben comprenderse por el momento más crítico de la pandemia que vivimos en la capital sonorense.
Conciliador, el Presidente del Poder Judicial sonorense recalcó que, si bien algunas de las prohibiciones emitidas por el Ayuntamiento puedan ser cuestionadas e incluso combatidas mediante amparo por quienes se sientan perjudicados, son justificables ante la necesidad de evitar más contagios y muertes por el nuevo coronavirus.
Me queda claro que Contreras se limitó a emitir la opinión profesional que le solicitaron y, en el caso del Magistrado Presidente, deja a salvo el derecho a todo ciudadano a no estar de acuerdo y en su caso demandar la protección judicial, pero a la vez hay en él la visión como parte de los poderes el estado que en este momentos están obligados, sobre todo, a proteger la salud y la vida de los gobernados.
Diríamos, en buen Cristiano, que el horno no está para bollos. Punto.
LA VIOLENCIA QUE SE VIENE…
Hay otro escenario que es igual de funesto: la violencia física contra las personas y contra las propiedades, que con origen político parece estar en gestación desde las entrañas del propio gobierno federal.
Hace unos días, el ex presidente del IFE (hoy INE) y actual director de la reconocida consultoría de riesgo político Integralia, Luis Carlos Ugalde, preveía que en México estarían en formación los llamados “comités de defensa de la cuarta transformación” con miras al próximo año.
Ugalde habló sobre ese tipo de comités que, aparte de la promoción ideológica izquierdista recurren a la violencia para intimidar a la oposición y a los ciudadanos en general, han sido formados en todos los países en que se han instalado dictaduras y cuyos regímenes son adorados por seguidores y dirigente de la 4T.
Y tan no anda errado el señor Ugalde que en realidad su suposición llega tardía, pues en realidad esos comités ya tienen meses en formación y los llamados urgentes a intregrarlos se han intensificado en redes sociales.
De hecho existe la “Coordinación Nacional por la Unidad de las Izquierdas”, la cual en una reciente convocatoria llama a contrarrestar “la ofensiva de la derecha, que no pierde oportunidad para avanzar en sus planes golpistas, (y) nos obliga a acelerar la integración de los Comités de Defensa de la 4T.”
La convocatoria es a todas las fuerzas de izquierda -no solamente a las que militan en Morena- y aseguran que ya están integrados más de 300 de esos comités en todo el país, con la meta de formar más de tres mil.
El llamado es contra “las derechas políticas del PRI, PAN, PRD y hasta Movimiento Ciudadano”, a la “oligarquía empresarial, mafias incrustadas en los aparatos del Estado y cacicazgos regionales”, así como contra “grupos de comunicadores, intelectuales y académicos liberales”.
Allí está pues ese llamado, anticipo de la represión que se viene desde el propio gobierno.