El expresidente de México Luis Echeverría Álvarez murió la noche del viernes 08 de julio a la edad de 100 años en su casa de Cuernavaca, en el centro de México.
Presidente de la República entre 1970 y 1976, su nombre quedará vinculado para siempre a los peores años de la Guerra Sucia, a Tlatelolco 1968 (cuando era secretario de Gobernación en la Administración de Gustavo Díaz Ordaz), así como la matanza del Jueves de Corpus Christi en 1971 –también conocida como El Halconazo– siendo él presidente de la República.
Como sucesor de Díaz Ordaz, Echeverría buscó continuar con el avance de la economía del llamado ‘Milagro mexicano’. Sin embargo, su estrategia de mayor gasto público y endeudamiento llevó a México a una crisis económica. Durante su Gobierno, la inflación alcanzó niveles históricos de hasta 27% anual y el peso mexicano se devaluó al finalizar su Administración.
Tras dejar la presidencia, ocupó cargos diplomáticos y comenzó a vivir alejado de la vida pública. En 2002, fue llamado por la Justicia para responder por la matanza de Tlatelolco. El expresidente admitió entonces los ataques contra los estudiantes, pero aseguró tener “la conciencia tranquila”. “Es una tragedia nacional que hay que aclarar para que no se repita, investigar y llegar a establecer todos los hechos concretos”, dijo entonces al fiscal. Echeverría fue acusado de genocidio, pero la causa no prosperó a pesar del intenso debate que las acusaciones generaron en los primeros años del siglo XXI.
En enero Echeverría celebró su cumpleaños número 100 -vía Zoom- con varios excolaboradores y antiguos aliados del PRI. Su última aparición pública fue en junio del año pasado, cuando acudió en silla de ruedas a vacunarse contra la covid-19 en Ciudad Universitaria.
