En un momento considerado como histórico para la salud pública global, los Estados Miembros de la Organización Mundial de la Salud (OMS) aprobaron por abrumadora mayoría el primer Acuerdo sobre Pandemias del mundo, durante la 78ª Asamblea Mundial de la Salud, celebrada en Ginebra.
El tratado, compuesto por 35 artículos, es resultado de más de tres años de negociaciones motivadas por los devastadores efectos de la pandemia de COVID-19. Su objetivo es construir un mundo más seguro, equitativo y preparado ante futuras pandemias.
Una victoria para la salud pública global
El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, celebró el acuerdo como “una victoria para la salud pública, la ciencia y la acción multilateral”.
“El mundo es hoy más seguro gracias al liderazgo, la colaboración y el compromiso de nuestros Estados Miembros para adoptar este histórico acuerdo”, declaró Tedros.
La votación contó con 124 votos a favor, cero objeciones y 11 abstenciones, según datos de Naciones Unidas.
¿Qué contempla el Acuerdo?
El documento establece principios, enfoques y herramientas para mejorar la coordinación internacional en áreas clave como:
- Prevención de pandemias.
- Acceso equitativo y oportuno a vacunas, terapias y diagnósticos.
- Sistemas de preparación y respuesta más sólidos.
- Promoción de la equidad global en salud.
Además, el acuerdo reconoce las lecciones aprendidas de la pandemia de COVID-19, que dejó un saldo de cerca de siete millones de muertes en el mundo, con sistemas de salud colapsados y economías paralizadas.
Sin injerencia en la soberanía nacional
Un punto clave del tratado es que no otorga poder a la OMS para modificar la legislación interna de los países. Se aclara expresamente que no puede ordenar confinamientos, mandatos de vacunación, ni medidas terapéuticas o diagnósticas obligatorias.
“El Acuerdo no impone mandatos, sino que promueve la cooperación y el acceso justo a recursos sanitarios”, puntualizó el Dr. Teodoro Herbosa, presidente de la Asamblea y secretario de Salud de Filipinas.
Un paso hacia la justicia sanitaria
El nuevo tratado busca corregir las desigualdades evidenciadas durante la pandemia, cuando muchos países quedaron rezagados en el acceso a vacunas y tratamientos.
“Este es un acuerdo único en su tipo. Representa un compromiso global para garantizar que las pérdidas sufridas no se repitan”, añadió Herbosa.
