Leonel Messi anda mal y de malas. Mientras se recupera de la lesión que sufrió recientemente los problemas legales lo acechan y están pidiendo 22 meses de cárcel para el futbolista.
Un juez de Barcelona elevó a juicio la causa por la que se investiga a Messi por defraudación fiscal, desestimando así la postura de un fiscal que ya lo había exculpado por los cargos y consideraba que el responsable del desvío del dinero a paraísos fiscales es Jorge Messi, padre del jugador.
El caso se inició en 2013 y lleva ya más de dos años de jaloneo judicial. Una resolución judicial hizo público que considera que hay indicios contra el jugador, toda vez que fue el propio “Lio” quien firmaba los contratos de imagen y era socio y administrador de las empresas que intermediaron en la evasión fiscal de la que se lo acusa junto a su padre.
El juez que elevó la causa es Manuel Alcover Povo, de 33 años, proviene de una familia de juristas. Se desempeña como juez Tercero de Instrucción de Gavá, localidad de Barcelona ubicada al noreste de España.
La pena de 22 meses de prisión no se hará efectiva a menos que la autoridad procesal considere lo contrario. “Los Jueces o Tribunales podrán dejar en suspenso la ejecución de las penas privativas de libertad inferiores a dos años mediante resolución motivada, atendiendo fundamentalmente a la peligrosidad criminal del sujeto”.
De acuerdo a El País y la información que le fue revelada, “Messi es ‘profano’ en temas tributarios, pero que ‘no puede ignorar’ que buena parte de sus ingresos por la explotación de sus derechos de imagen llegaban a través de empresas ubicadas en paraísos fiscales, como Uruguay o Belice.”
