El gobierno de Estados Unidos desairó la cita que tenía con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en Washington para la audiencia pública que analizaría las órdenes ejecutivas sobre inmigración y el muro fronterizo.
El organismo que vela por los derechos humanos en el continente quería hablar ante los temores que han causado esas órdenes y la posibilidad de que éstas violen normativas regionales.
Desde el viernes pasado la CIDH celebra las audiencias públicas del 161 periodo de sesiones. La reunión generó expectativas, inclusive el secretario ejecutivo, Paulo Abrão, declaró hace algunos días que EU se presentaría “siempre estuvieron y contamos con que estarán”, dijo.
No es la primera vez que un Estado no acude a una audiencia pública en la CIDH sobre un tema que considera crítico. Entre los que han faltado están: Cuba, Nicaragua, Ecuador y Venezuela.
Los Estadounidenses tampoco se presentaron a la audiencia previa sobre el secuestro de dos ciudadanos japoneses en Perú durante la Segunda Guerra Mundial y enviados a un campo en ese país. Es la primera vez que EU falta a reuniones de este tipo.
“Es una política de aislamiento propia de regímenes autoritarios”, manifestó Jamil Dakwar, director del programa de derechos humanos de la American Civil Liberties Union (ACLU), ante la ausencia de los norteamericanos.
