Aunque son el segundo grupo que más contribuye al SAT, los asalariados casi
no presentan declaración ni piden devolución de impuestos por saldo a favor.
De las de 50 millones de personas físicas que tributan en el régimen de sueldos y salarios, alrededor del 90% no hacen directamente su declaración anual ante el SAT (que empieza este día primero y durante todo el mes de abril) y, por tanto, no solicitan devolución de impuestos.
Ello ocurre porque la mayoría ni siquiera sabe de esa posibilidad de obtener un reembolso por sobrepago de impuestos, para lo cual deben prepararse durante el ejercicio fiscal solicitando facturas por sus pagos por colegiaturas escolares y gastos médicos, entre otros.
Según un estudio de Fixat (consultoría contable y servicios en plataforma digital), luego de los grandes contribuyentes, como Pemex y CFE, que pagaron impuestos por 2 billones 292,409 millones de pesos, en el ejercicio 2023 los trabajadores asalariados aportaron al fisco 1 billón 123,479 millones de pesos, que son 153 mil millones más que las aportaciones de las personas morales, que en el mismo período pagaron impuestos por 970,325 millones de pesos.
No obstante la enorme cantidad de dinero, la mayoría de los asalariados no deduce impuestos ni reclama devoluciones, pues ni siquiera se dan cuenta que tienen saldos a favor.
Al cuarto trimestre de 2023, del total de contribuyentes activos con obligaciones fiscales, el 96% corresponde a personas físicas (78% a sueldos y salarios y 18% a los demás regímenes fiscales) y el 4% a personas morales.