Finalmente renunció el subdirector de la Secretaría de Seguridad Pública en Sonora, el abogado Víctor Bonillas Murrieta, involucrado en el caso de Gisela Peraza.
A Bonillas Murrieta se le integra una averiguación previa por denuncia presentada por el abogado de la ex empleada doméstica del ex gobernador, quien lo acusa de ser uno de los presuntos responsables de la tortura y privación ilegal de la libertad que sufrió ella.
De la Procuraduría General de Justicia del Estado se le enviaron dos citatorios para comparecer ante el Ministerio Público que integra la averiguación previa correspondiente, sin que se haya presentado a declarar.
Al respecto, el pasado viernes, el Procurador General de Justicia, Rodolfo Montes de Oca, precisó que depende del Ministerio Público que tiene el expediente definir si envía un tercer citatorio o pide la orden de comparecencia.
Su renuncia como Subsecretario de Seguridad Pública fue presentada con el argumento de que requiere de tiempo para responder a esos señalamientos que le hacen además de que en diversos medios de comunicación escritos se ha cuestionado su permanencia como funcionario público en el área de Seguridad y que a la vez sea parte de una averiguación penal en su contra.
Por parte de la Secretaría de Seguridad Pública no se ha dado a conocer quién ocupará el cargo que ha dejado Bonillas Murrieta.
