La hipertensión pulmonar es uno de los padecimientos que puede afectar los ingresos familiares hasta en un 70% sin contar los daños para la salud de los pacientes.
De acuerdo con Mayo Clinic, la hipertensión pulmonar es una variedad de presión arterial alta que afecta el lado derecho del corazón y las arterias pulmonares.
Cuando se presenta, las arteriolas pulmonares que son las arterias más pequeñas o “delgadas” de los pulmones se bloquean, se estrechan o se destruyen; esto dificulta el flujo de sangre hacia los pulmones y aumenta la presión arterial en las arterias pulmonares.
Mientras aumenta la presión, el ventrículo derecho del corazón tiene que trabajar más para bombear la sangre a los pulmones generando así un debilitamiento y falla del músculo del corazón.
Puede ser mortal y algunas de sus presentaciones no tienen cura. Sin embargo, existen tratamientos que pueden reducir los síntomas de hipertensión pulmonar y mejorar la calidad de vida.
La enfermedad puede clasificarse en 5 grupos:
– Hipertensión arterial pulmonar
– La hipertensión pulmonar causada por enfermedad cardíaca del lado izquierdo
– Hipertensión pulmonar causada por enfermedad pulmonar
– Causada por coágulos sanguíneos crónicos
– Hipertensión pulmonar asociada a otras afecciones que tienen motivos poco claros o desconocidos.
Entre sus síntomas está la dificultad para respirar, al comienzo sucede mientras se realiza ejercicio y progresa hasta causar dificultad respiratoria durante períodos de descanso.
La fatiga, mareos, desmayos y dolor en el pecho son otros síntomas característicos.
Hinchazón en tobillos piernas y abdomen, además de cianosis (coloración azulada en labios y piel), el pulso acelerado y palpitaciones forman también parte de la sintomatología.
Un diagnóstico tardío agrava la enfermedad y pone en riesgo la vida; es clave identificar los síntomas y acudir con un especialista.
Factores de riesgo. Se asocia con el sobrepeso, antecedentes familiares de la enfermedad y consumo de drogas.
Finalmente, el consumo de medicamentos que inhiben el apetito y vivir en alturas elevadas también predisponen.