Con un marcador de 20-18 a favor de los Broncos, Denver disputará su octavo Super Bowl, ahora contra los Panteras de Carolina.
En el partido contra los Patriotas, las defensivas de ambos conjuntos incomodaron a los mariscales de campo rivales, los obligaron a lanzar el ovoide en situaciones poco favorables.
Al quarterback de Denver, Peyton Manning, lo capturaron en tres ocasiones. En tanto al líder de New England, Tom Brady, lo detuvieron cuatro veces y le interceptaron dos pases; una de estas situaciones le permitió a sus rivales marcar la diferencia en la pizarra.
“Es fabuloso jugar frente a nuestra afición. En defensa, hemos dejado la piel durante todo el año y conseguimos la manera de ganar otro partido complicado”, comentó el entrenador de Denver, Gary Kubiak.
Peyton Manning colaboró con 176 yardas, completó 17 de 32 pases y dio dos pases para anotación. El jugador que porta el número 18 de Denver registró marca de 6-11 en los duelos que ha enfrentado a Brady; el Super Bowl 50 significará el cuarto partido para el jugador en su carrera.
“Ha sido una rivalidad especial a lo largo de mi carrera contra los Patriots”, declaró Manning, quien a sus 39 años -y quizá ya en su última temporada en la NFL- se convertirá en el quarterback más longevo que conduce a su equipo a un Supertazón.
Peyton añadió tras su actuación de ayer: “Enfrentarlos (a los Patriots) cuatro veces en el campeonato de la AFC, con tanto de por medio, esos partidos han sido muy especiales”.
Tom Brady, líder de los Patriots, registró 310 yardas, fue efectivo en 48% de sus pases, lanzó un pase para touchdown.
El escenario para los pupilos de Bill Belichick pudo ser un poco más sencillo, en caso de que Rob Gronkowski no hubieran fallado el primer intento de anotación de punto extra en el primer cuarto, punto que en los últimos minutos del encuentro pudo hacer una pequeña diferencia.
Al Sports Authority Field at Mile High, casa de los Broncos de Denver, se dieron cita un total de 77,112 aficionados.
La franquicia de Carolina superó al representativo de Arizona, por 49-15. Los Panteras, tras concluir una temporada con una marca de 15-1, concretaron su pase hasta el Super Bowl a costa de los Cardinals.
Los Panteras comenzaron a celebrar la victoria cuando faltaban dos minutos por jugar del último periodo, ya que el representativo de los Cardinals nunca los pudo detener.
Arizona mostró algunos esfuerzos por recortar la diferencia en el marcador, lo cual intentó al inicio del último cuarto, y sólo pudo disminuir la diferencia a 19 unidades, posteriormente, el conjunto de Carolina volvió a tomar el mando del duelo.
El segundo mejor equipo de la Conferencia Nacional en la fase regular, Arizona, perdió el balón siete veces.
Arizona registró un total de 281 yardas, mientras que Carolina sumó 476.
Newton y compañía mantuvo el control del encuentro desde el primero cuarto en el que marcaron una diferencia de 17 unidades, con un gol de campo y dos touchdowns.
Newton registró 335 yardas, fue efectivo en 67% de sus pases, dio dos pases para anotación, además, condujo en dos ocasiones el ovoide hasta la zona de anotación y lo capturaron en una ocasión. Cam declaró sobre el juego que hicieron lo que mucha gente pensó que no realizarían.
El líder de los Cardenales de Arizona, Carson Palmer, completó 23 de 40 pases, dio una pase para anotación y le interceptaron cuatro pases.
