Entre los archivos que guarda celosamente la Fonoteca Nacional, se encuentra una grabación que realizó Porfirio Díaz en respuesta a una carta que recibió de Thomas Alva Edison, prolífico inventor del fonógrafo y la bombilla incandescente entre otros.
El mensaje lo pronunció Díaz el 15 de agosto de 1909, desde Chapultepec, al agradecer a Edison el envío de uno de sus primeros fonógrafos, y un admirador y seguidor de los avances tecnológicos de la época.
El mensaje, con duración menor a los dos minutos, se mantiene en el acervo de la Fonoteca Nacional.
La grabación de Porfirío Díaz, de voz ahogada, dice lo siguiente:
Yo también como usted, recuerdo con placer el tiempo aquel en que tuve la satisfacción de conocerle, y conocer sus atrevidos experimentos, haciéndome partícipe de su fe inquebrantable en el grandioso porvenir de la ciencia empírica. (…) Me es grato complacerle porque tengo en muy alta estimación a los grandes benefactores de la humanidad, y usted es uno de ellos, porque usted ha creado nuevas fuentes de felicidad, de bienestar y de riqueza para el género humano utilizando las más poderosas fuerzas conocidas: luz, electricidad, trabajo y genio. Su amigo, que con orgullo estrecha su mano, Porfirio Díaz”.
