Parece una broma, pero no lo es… El robo de cabello es un delito que se ha incrementado a nivel mundial en los últimos años.
Apenas el martes nos enteramos que 20 alumnas y dos maestras de la telesecundaria ‘Vicente Suárez’, ubicada en la periferia de la ciudad de Acapulco, fueron sometidas y trasquiladas por un grupo criminal.
De acuerdo con testimonios, los delincuentes obligaron a las mujeres a arrodillarse para cortarles el cabello con tijeras y machetes.
Aunque es un delito con al menos 300 años de antigüedad, según algunos registros, el robo de cabello ha repuntado en la última década, con una oleada de casos en Estados Unidos, India y Latinoamérica, principalmente.
Una niña resultó apuñalada el pasado sábado en Colombia al resistirse al robo de su cabello por parte de dos hombres.
El año pasado, más de 50 mujeres reportaron haber sido rapadas en el norte de la India en circunstancias extrañas, pues la mayoría denunció haber perdido la consciencia en el transcurso de los asaltos.
Los casos incluso causaron una crisis de histeria entre las mujeres de las regiones afectadas, sobre todo en zonas rurales.
En 2013, un grupo denominado Las Pirañas aterrorizó a Venezuela con el robo de cabello a punta de pistola.
Los delincuentes amagaban a las víctimas con armas de fuego mientras les cortaban el cabello, el cual era vendido posteriormente en el mercado negro.
En 2011, una serie de robos de cabello en salones de belleza y tiendas especializadas se produjeron en Estados Unidos, causando pérdidas de varios cientos de miles de dólares, de acuerdo con un reportaje de The New York Times.
Apenas en febrero pasado, tres mujeres irrumpieron en una tienda de productos de belleza en Carolina del Norte y sustrajeron una gran cantidad de extensiones de cabello cuyo valor fue calculado en por lo menos 24 mil dólares.
En 2008, un documental de la cadena británica BBC siguió la ruta del robo de pelo desde su origen, en países como India o Rusia, hasta su destino en salones de belleza de la Unión Europea y Estados Unidos.
EL COSTO DE LA VANIDAD
Expertos consultados sobre el tema aseguran que este delito es motivado por la alta demanda y los altos s costos de las pelucas y las extensiones de pelo en los centros de belleza.
Es una especie de signo de los tiempos”, afirmó el académico Neal Lester, profesor de la Universidad Estatal de Arizona que ha escrito varios artículos sobre políticas de género y raza del cabello, a The New York Times.
La gente está siendo emprendedora, y los tejidos y las extensiones de cabello son caros, por lo que no es sorprendente que la gente venda cabello de la misma forma que vende cosas en el mercado negro, como carteras imitación”, añadió.
Como en todo tipo de productos, en el mercado de cabello existe una clase que es la más buscada y costosa por los clientes.
Conocido como cabello ‘remy’, esta clase cabellera tiene la peculiaridad de ser ‘virgen’ -por nunca haber sido sometido a algún tipo de tratamiento- y de contar con la cutícula intacta (la capa más externa, dura y transparente).
El cabello ‘remy’ de las mujeres indias es el más popular y puede alcanzar un precio de hasta 4 mil pesos mexicanos o más por paquete, tomando en cuenta que una persona requiere un promedio de dos paquetes.