El pleito entre Felipe Calderón y Humberto Moreira sigue subiendo de tono:
Ahora el exgobernador de oahuila llamó “borracho”, “usurpador” y “asesino” al expresidente para rematar diciendo que le robó la presidencia al entonces candidato del PRD, Andrés Manuel López Obrador.
La declaración de Moreira se dio en respuesta a los señalamientos que hizo Calderón durante una visita a Saltillo para apoyar al candidato panista a la gubernatura de Coahuila, Guillermo Anaya, donde aseguró que el priista “es tan malo, tan malo, que ya ni en el PRI lo quieren”.
Moreira aseguró que el expresidente es repudiado en su estado natal, Michoacán, al igual que su hermana Luisa María Calderón, Cocoa, quien perdió la gubernatura de esa entidad dos veces, primero en 2011 frente al priista Fausto Vallejo, y luego en 2015 con el perredista Silvano Aureoles.
“Cuando fue su hermana y yo fui presidente del partido (PRI) a nivel nacional, perdió también, íbamos en tercer lugar y perdió; ahora, en la última elección también perdió. Dice Calderón (…) ni en su partido lo quieren, pues a él no lo quieren ni en su tierra natal, ganas tiene de ir a su tierra natal; no es que no lo quieran, lo repudian”, sostuvo en un acto político.
Pero Moreira no se quedó callado: “Que no se haga tarugo, Calderón se robó la presidencia, se la robó a Andrés Manuel López Obrador en 2006, y yo no firmé aquella carta obsequiosa, nadie de ustedes lo sabía, pero ahí está la carta, ahí está en los archivos, en la hemeroteca. Firmaron otros, yo nunca acepté que ese señor fuera el presidente”.
Y fue más allá al comparar al panista con Victoriano Huerta: “igual de borracho, igual de ratero, porque se robó la presidencia; igual de usurpador, igual de hocicón, igual de represor, igual de asesino”.
Según información publicada por El Diario de Coahuila, el priista –señalado como responsable de que la deuda de Coahuila creciera de 323 millones de pesos en 2005 a 36 mil 675.8 millones de pesos en 2011– reveló que a la semana siguiente de la elección en 2006, se pidió a los gobernadores que firmaran una carta obsequiosa donde reconocían que el panista había ganado la Presidencia.
“Dos gobernadores no aceptamos firmarla, esa carta se publicó. Si usted va a la hemeroteca, está publicada, y dijimos que no porque si bien a Roberto Madrazo no le favoreció el triunfo, también es cierto que el triunfo en 2006 fue para AMLO; entonces dos gobernadores nos opusimos, Silvano (de Nayarit), que su esposa les puede dar cuenta porque él ya falleció, y yo, que no acepté firmar esa carta reconociendo de manera prematura al usurpador”, apuntó.
Recalcó: “No ganó y él lo sabe, había una presión política en el país, estaba a punto de estallar un movimiento, una inconformidad, y entonces tuvo la genial idea ‘para él’ de inventar una guerra, entonces es una medida política que habría que analizar, porque eso genera que todo mundo tenga miedo y se hace una guerra, todo mundo andaba asustado por las balaceras y todo lo que pasó.”
En mayo de 2011, Humberto Moreira, entonces presidente nacional del PRI, aseguró que para los comicios de 2012 el enemigo común de ese partido y el PRD era el PAN.
Tras esas declaración, López Obrador dejó en claro que no se aliaría ni con el PRI ni con el PAN, y exhortó a Humberto Moreira a “no manipularnos, porque no nos chupamos el dedo; yo sé muy bien que el PRI y el PAN son lo mismo”.
Incluso demandó al exgobernador de Coahuila que aclarara “por qué le ayudaron al fraude electoral de 2006 al PAN, por qué se aliaron al PAN en el 2006”, y aseguró que los gobernadores priistas actuaron en el “fraude”.