El Partido Acción Nacional (PAN) no defenderá al ex gobernador de Sonora, Guillermo Padrés, ni a la ex alcaldesa de Monterrey, Margarita Arellanes, de las acusaciones de corrupción y desvío de fondos públicos que pesan sobre ambos, anunció la Comisión Anticorrupción del partido.
Acción Nacional reiteró su compromiso con la transparencia y el combate a la corrupción, por lo que no defenderá ni solapará a militantes que hayan cometido violaciones a la legislación penal, incluidos delitos relacionados con el servicio público.
El presidente de la Comisión Anticorrupción del PAN, Luis Felipe Bravo Mena, afirmó que desde hace varias semanas se inició un procedimiento para los casos de Guillermo Padrés y Margarita Arellanes.
El trabajo de esta institución partidista, dijo el ex líder nacional panista y ex senador, “cumplirá con todos los requisitos de las investigaciones serias, porque no se trata únicamente de hacer anuncios espectaculares”.
Asimismo, expresó que “el objetivo de la Comisión es defender a la institución de los fenómenos de corrupción, porque Acción Nacional ha entrado en una etapa de cero tolerancia para todos”.
Con la formalización y solidez jurídica de su Comisión Anticorrupción, el PAN está innovando seriamente en esta materia, ante el reclamo y la indignación del propio partido y de la sociedad con la corrupción”, señaló Bravo Mena.
De comprobarse las acusaciones en contra del ex gobernador Guillermo Padrés Elías y en contra de la ex alcaldesa Margarita Arellanes, serán expulsados del Partido Acción Nacional.
En las últimas horas, la Procuraduría General de la República (PGR) solicitó a un magistrado, con sede en el Estado de México, el ejercicio de acción penal en contra del ex gobernador de Sonora, Guillermo Padrés Elías.
Padrés enfrenta acusaciones por ejercicio indebido del servicio público, ejercicio abusivo de funciones y delitos contra la administración de la justicia.
Ante la probable detención del ex mandatario que protagonizó decenas de escándalos de probable corrupción, un Juez federal suspendió cualquier orden de aprehensión que pudiera existir contra Guillermo Padrés, siempre y cuando no se trate de una acusación por delitos graves o que ameriten prisión preventiva.
