Felipe Calderón anunció hoy que la pensión de 205 mil pesos mensuales que recibe por haber sido Presidente de la República Mexicana será donada a una asociación civil “Aquí nadie se raja”, que atiende niños con cáncer.
De esta forma el ex mandatario “renuncia” a la pensión… no así a los 19 funcionarios y soldados del Estado Mayor Presidencial (EMP) que lo cuidan a él y su esposa, la hoy aspirante presidencial panista Margarita Zavala.
En una misiva, Calderón le explica a Laura Vidales Flores, directora de la AC, que los expresidentes tienen una pensión de retiro para que quien ocupe el cargo pueda tomar decisiones delicadas con toda libertad sin preocuparse por su futuro y, en consecuencia, sin ser vulnerable a los fuertes intereses económicos que existen en nuestro país.
“Sin embargo, mucha gente la considera injustificada, dada la terrible situación del país y de millones de familias. En lo personal la he recibido porque nunca robé ni tenía otro ingreso distinto al de servidor público y la necesitaba. Afortunadamente, ahora he tenido la oportunidad de dar conferencias y realizar otras actividades que me generan ingreso. Yo espero que mi trabajo como conferencista me permita sostener a mi familia y así seguir apoyando a las niñas y los niños con cáncer a través de esta admirable institución”.
Los principales ingresos de Calderón hoy en día son los que provienen de la empresa Avangrid, dedicada a la generación de energía, para la que trabaja desde julio del año pasado y le paga la mayor parte de los 8 millones 267 mil pesos de sus ingresos anuales.
El esposo de Margarita Zavala, quien busca ser candidata presidencial del Partido Acción Nacional (PAN) o independiente, tiene a su servicio un número no cuantificado de vehículos y elementos del EMP que lo custodian y transportan a donde quiera que viaja, en México y en el extranjero.
Zavala Gómez del Campo utiliza también vehículos y soldados del EMP en sus actividades como precandidato a la Presidencia de la República.
De acuerdo con información oficial, los expresidentes Ernesto Zedillo y Carlos Salinas de Gortari también renunciaron a su pensión. En el caso del primero, sólo cuenta con tres personas de apoyo que le cuestan al erario 51 mil 357 pesos mensuales.