“Necesitamos estar a la altura, sé que va a ser muy difícil, sin embargo vamos a hacer todo lo que humanamente sea posible para atenderlos con solidaridad y respeto”, aseguró la presidenta municipal, Celida López Cárdenas, por el próximo paso de la caravana de miles de migrantes centroamericanos.
“Hermosillo los recibirá con los brazos abiertos, somos gente solidaria y creemos en la familia, estamos dispuestos a ayudar a nuestro prójimo, porque es una verdadera tragedia lo que viven estas familias, por el dolor y sufrimiento que los orilla a migrar de esta manera”, manifestó.
Mi deber como presidenta municipal es ser muy solidaria con la gente que llega, son personas y pudiéramos ser nosotros, enfatizó; me parece que detrás de cada familia que vive este gran pesar, lo menos que podemos hacer como hermosillenses es demostrar de qué estamos hechos.
López Cárdenas comentó que en la reunión de gabinete de este lunes se trató como agenda de riesgo coordinar esfuerzos para recibir a la caravana, a la que siguen paso a paso para entender cómo se organizan, ya que no aceptan invitaciones para albergues sino que prefieren estar juntos en plazas públicas.
Dijo que se sabe que hay mucho niño menor de edad, de entre dos y cuatro años, lo que motiva a establecer medidas especiales para ellos y buscar un espacio público para garantizar su seguridad y aseo personal; pudiera ser un gran estacionamiento como el del estadio Héctor Espino.
“Se desconoce cuántos días estarían en la ciudad, por lo que de inmediato se buscará entablar comunicación con sus líderes para conocer las necesidades y plan de tránsito, a la vez de apoyar para que sea lo más ágil posible”, precisó.
Necesitamos hacer un esfuerzo para ayudar con la alimentación, expuso, trabajamos en una logística para pedir el apoyo a mercados, comercios, restaurantes y familias; así como de médicos para atender a los niños, entre otras necesidades.
La alcaldesa mencionó la importancia de hacer equipo con autoridades estatales en cuanto a los menores de edad que vienen solos; de no encontrar familiares adultos que se hagan responsables, el deber es solicitar el apoyo para localizar a sus padres y que regresen a su país de origen.