En una hazaña que parecía imposible, la Roma remontó un marcador adverso al vencer el martes 3-0 al Barcelona para avanzar a las semifinales de la Liga de Campeones.
Los Giallorossi visaron su pase gracias al criterio de los goles de visitantes, pese a la derrota 4-1 en la ida de los cuartos de final, pues le dieron la vuelta a la desventaja firmando un marcador global de (4-4).
El defensor griego Kostas Manolas anotó el gol decisivo con un frentazo tras un tiro de esquina a los 82 minutos, en un Stadio Olimpico que toda la noche fue una auténtica caldera.
La Roma puso en marcha la remontada temprano cuando Edin Dzeko dominó un pase en elevación, colándose entre los defensores Samuel Umtiti y Jordi Alba. Todo muy fácil para el club italiano cuando apenas habían transcurrido escasos seis minutos.
Luego, cerca de la hora de partido, Dzeko provocó que Gerard Piqué le cometiera un penal que Daniele De Rossi transformó en gol.
Lionel Messi y Luis Suárez, los rapaces goleadores sudamericanos del equipo catalán, no gravitaron en un duelo en el que la Roma le quitó la posesión al durante largos tramos, robándole el concepto de juego es el sello de presentación del Barcelona.
fdr
