El ex gobernador de Sonora Guillermo Padrés podría salir libre gracias a las bondades del nuevo sistema de justicia penal.
El abogado José Luis Pérez Medina considera que la decisión de Padrés al entregarse a las autoridades ha sido una estrategia jurídica de la defensa porque saben que los delitos de que se le acusa no son considerados graves.
“Me parece una estrategia de defensa excelente porque los delitos que se están imputando al ex gobernador, mal llamado lavado dinero, pero en realidad está previsto en el artículo 400 bis como operaciones con recursos de procedencia ilícita y el diverso delito de enriquecimiento ilícito, también está previsto en el código penal, tienen, el primero una penalidad de 5 a 20 años y el segundo de 2 a 14 años, pero atendiendo al artículo 18 constitucional que ordena que no exista prisión preventiva sino únicamente por delitos graves y en apoyo a eso el art 19 constitucional establece con claridad todo un catálogo de delitos que deben ser considerados graves y la sorpresa es que ninguno por si sólo están contemplado como graves en la constitución y no ameritan prisión preventiva”.
Con dichos argumentos jurídicos, el ex gobernador Padrés puede llevar su proceso en libertad, sin embargo el nuevo código sí considera algunas medidas cautelares.
Si el ex gobernador comprueba que tiene arraigo, trabajo, familia y bienes en una determinada circunscripción territorial, sin peligro de que evada la acción de la justicia, ningún juez le va a fijar la prisión preventiva.
Sin embargo, el juez podría imputarle el delito de delincuencia organizada y entonces cambia el contexto y entonces sí quedaría en reclusión.
“Si no le agregan el delito de delincuencia organizada, el ex gobernador Padrés tendrá un 70 por ciento de posibilidades de salir campantemente del juzgado sin que ninguna autoridad pudiera tocarlo y sin tener prisión preventiva, sin perjuicio conforme al art 155 en sus diversas fracciones del código de nacional de procedimiento penales podrían fijar medidas cautelares como exhibición de garantías económicas o prohibición de abandonar ciertas zonas o el propio país “, recalca.
Cabe aclarar que la orden de aprehensión que fue girada en su contra y por el que era buscado en 190 países sólo era para su localización, no para vinculación a proceso, por lo que podría salir del juzgado del reclusorio oriente donde se presenta.