El ministro de Justicia de Italia solicitó a las autoridades que examinen un caso en el que un tribunal absolvió a un hombre del cargo de violar a una mujer porque ella no gritó.
El caso causó indignación y polémica no sólo en aquel país, sino que también ha ocasionado duras críticas por parte de grupos defensores de los derechos humanos.
Un tribunal en Turín falló el mes pasado que el hecho de que la mujer le dijera “¡Ya basta!” al colega que presuntamente la violó era una reacción demasiado débil como para probar que fue agredida sexualmente. En la decisión se especificó que ella no gritó ni pidió ayuda.
“Cuando escuché que lo absolvían, fue como haber sufrido la violencia una segunda vez. Estuve en mi casa llorando cinco días. Me sentí vacía. Ahora lo que más me duele es no haber sido entendida por esos jueces”.
Tras el fallo, la víctima se desmayó. Mientras su abogada, Virginia Iorio, no disimuló su indignación. “Ésta es una sentencia de otra época. Se dio por descontado que todos tenemos las mismas reacciones en situaciones similares. Es increíble”, expresó al Corriere.
Como si no fuera suficiente, después de la sentencia, ella tendrá además que responder por el cargo de calumnia.
Annagrazia Calabria, legisladora del partido opositor Forza Italia de tendencia centro-derecha, censuró el fallo y afirmó: “Ciertamente, uno no puede castigar la reacción personal de una mujer aterrorizada por lo que le está pasando”.