La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) decomisó varias tarántulas que iban a ser usadas para preparar tacos en un restaurante de la Ciudad de México.
Se dieron cuenta de su intención gracias a una publicación en redes sociales del restaurante “México en el paladar”, en la que hacen referencia a uno de los nuevos platillos de este negocio: los tacos de tarántula.
El problema es que la tarántula de caderas rojas (Brachypelma vagans), usada para preparar este platillo, es una especie protegida.
Este restaurante, que se encuentra en el Mercado de San Juan, es famoso por ofrecer platos de la gastronomía mexicana prehispánica, donde emplean gusanos, insectos y otros invertebrados. Un video en su página de Facebook muestra cómo se le prende fuego a una tarántula hasta dorarla y dejarla lista para su degustación. El precio de los tacos de tarántula es de 500 pesos.
Al llegar al local, las autoridades de la Profepa encontraron cuatro cadáveres de estos arácnidos, ya flameados y dorados, listos para ser colocados en las tortillas. Los dueños del negocio no pudieron acreditar su procedencia legal.
En México hay criaderos de tarántulas que cuentan con el apoyo del gobierno. En ellos anualmente se producen de 11 mil a 14 mil ejemplares, los cuales son muy cotizados a nivel internacional como mascotas. Cada tarántula puede alcanzar un costo de hasta 8 mil pesos.
