Cuando llega el invierno y empieza a hacer frío, la temperatura de nuestro cuerpo también disminuye, lo que estimula el apetito, traduciéndose en una sensación de hambre.
Por tal razón, es bastante común que vayamos a buscar alimentos y comamos más cantidad de lo que acostumbramos en épocas de calor. Esto es así porque al comer, se aumenta la temperatura de nuestro cuerpo y de esta forma permanecemos “calientitos”.
El efecto del aumento de la temperatura corporal por el consumo de alimentos se llama termogénesis (generación de calor). Cuando pasan de 30 a 60 minutos después de haber comido, nuestro cuerpo produce un 10% más de calor en comparación de cuando se tenía el estómago vacío.
Este incremento en la temperatura se da en primera instancia por la liberación de energía durante la digestión, esto significa que los alimentos no sólo aportan energía a través de sus calorías, sino que también aumentan la producción de calor.
Algunas personas comen más en invierno porque están menos activas o se sienten aburridas, además con tantos festejos la comida se multiplica y es muy fácil caer en los excesos.
También hay que sumar que, por las bajas temperaturas, las personas dejan de hacer ejercicio, sobre todo cuando lo practican al aire libre y se quedan en casa mirando la televisión, acompañadas de alimentos que muchas veces consumen sin control.
Para otras personas, el cambio de estación afecta su ánimo y por ello abandonan ciertas actividades como el ejercicio. Este fenómeno es conocido como desorden afectivo estacional. Cuando éste se presenta, los neurotransmisores cerebrales sufren cambios que producen un incremento en el deseo de comer carbohidratos en grandes cantidades.
Una investigación llevada a cabo en 195 personas encontró que, durante el mes de diciembre, se gana en promedio medio kilogramo de peso. Pero aquellos que viven con sobrepeso u obesidad ganan entre 2 y 3 kilos.Así que si ya ganaste peso durante diciembre y descuidaste el control de tu Diabetes, es necesario que vuelvas al camino que llevabas y además de bajar de peso, comiences un régimen de comidas saludables para que tu glucosa vuelva a estar en niveles óptimos.
