Como si fuera un personaje de una película de terror, una niña de 11 años asesinó a dos de sus hermanitos de sólo 9 meses y de 3 años de edad, por supuestas órdenes del diablo, en hechos ocurridos en Ciudad Madero, Tamaulipas.
Los crímenes fueron cometidos en distintas fechas, con diferencia de unos cuanto días, y fueron puestos al descubierto después de que la menor, identificada como Fernanda “C”, ingresó a un hospital tras intentar suicidarse con el consumo de pastillas.
La Agencia del Ministerio Público Especializado en Protección a la Familia informó que el 10 de agosto, personal del Hospital Civil de Madero notificó a las autoridades que la niña fue ingresada a ese centro hospitalario.
En su declaración, la menor confesó que “voces diabólicas” le habían ordenado suicidarse para reunirse con sus hermanitos, a los que había matado, por lo que las autoridades abrieron la averiguación previa 189/15.
Como parte de las investigaciones, se estableció que el pasado 19 de julio, al mismo hospital ingresó sin vida la pequeña Camila, de 9 meses de edad. En esa fecha, el Agente del Ministerio Publico Investigador acudió a dar fe de los hechos, determinando que la niña murió por un mal congénito.
El 27 de julio tocó el turno al pequeño Fabián, de 3 años de edad, quien fue internado inconsciente en el Hospital Civil, donde horas después falleció.
Dos días después, el día 29, también ingresó al hospital la pequeña Merely, de 9 años, pero esta vez sin consecuencias fatales. Solo fue atendida por crisis nerviosa y suplicaba que no dejaran que la tocara su hermana Fernanda, pues aseguraba que es mala.
En su confesión, la niña Fernanda relató “que ella privó de la vida a sus dos hermanitos, pues voces se lo ordenaban”. Narró que a ambos los asfixió: a la más pequeña le tapó la boca y la nariz, mientras que al de 3 años lo ahogó con una almohada.
José Luis y Fabiola, padre y madre de los pequeños, confirmaron que su hija de 11 años en varias ocasiones les contó que “hablaba con el diablo”, el cual salía de entre las sombras, pero aparentemente nunca se dieron cuenta de que esa patología fue fatal para su familia.