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NO MÁS CORRUPCIÓN LEGALIZADA EN EL GOBIERNO: NORIEGA

Por Jesús Ruiz Gámez

Lo primero que le dije ayer a Guillermo Noriega Esparza es que me ha parecido la persona ideal para estar al frente de la Contraloría General del Estado en el nuevo gobierno, ya que durante muchos años fue denunciante, desde las organizaciones ciudadanas, de la falta de transparencia, excesos y abusos en los gobiernos. Y ahora tiene la oportunidad de cambiar la bien ganada percepción de esa dependencia como simple “tapadera” de las corruptelas cometidas en cada sexenio.

Pero también le hice ver que la promesa de cambiar esa percepción se ha hecho al inicio de todos los sexenios y las historias han terminado siempre igual: con la certeza de que acaso sólo se investiga y sanciona la corrupción en las capas medias de la burocracia, mientras evidentes y multimillonarias transas quedan en la total impunidad.

Al nuevo Contralor lo entrevisté ayer en el programa Las Noticias En Kaliente (90.7 FM) y lo primero que concedió es que esa percepción sobre la contraloría ha estado bien ganada, pues el principal “déficit” en todos los órganos de control internos ha sido calificar solamente la legalidad de los procesos de contratación y licitación.

Es entonces cuando el nuevo Contralor alude a la existencia de la “corrupción legal”, que siempre ha existido, “que sólo califica la licitación y párenle de contar”.

Noriega sostiene que no hay en el mundo órgano de control que pueda evitar que dos mañosos (funcionarios y empresarios corruptos) se pongan de acuerdo y hagan un proceso amañado, pero sí hay formas en que se puede incidir y de entrada evaluar, valorar y sancionar, aunque la realidad es que la Contraloría estatal aplica muy pocas sanciones.

Añade que la Contraloría ha sido “minimalista” en la aplicación de sus facultades, cuando en realidad tienen muchos mecanismos, instrumentos y atribuciones para determinar si los precios y calidad en las obras y en compras del gobierno son las mejores del mercado, e incluso lo puede hacer antes o durante los procesos de contratación y ejecución, es decir antes de que los actos de corrupción estén consumados.

El nuevo Contralor concede entonces que ha faltado mucha disposición y voluntad política para usar todos los instrumentos de prevención, inhibición y sanción que la Contraloría tiene para el combate a la corrupción.

Pero Noriega rechaza que al contralor se le vea como un supuesto “zar anticorrupción”, como solían llamarle en un tiempo, pues su verdadera función es ser promotor de “la integridad pública”, para que todos los procesos y procedimientos en el gobierno se apeguen a las normas de control y optimización de los recursos.

Acepta el Contralor que no hay pretexto para que la labor preventiva y sancionatoria no se ejecute a plenitud, pues tiene a la mano todos los elementos para hacer que los funcionarios que “metan la pata” corrijan sus errores y para que aquellos que “metan la mano” a los recursos puedan ser llevados ante el ministerio público.

“SIN SANCIÓN ES SIMULACIÓN”

A Noriega le hicimos ver que la historia está llena de ejemplos de excesos y corruptelas que quedan en la impunidad, ante lo cual asegura que sigue una máxima desde hace muchos años: “sin sanción, es simulación”.

“Hay que sancionar y no simular”, sostiene, pero se le recuerda que los contralores seguramente han estado expuestos a las presiones de complicidades políticas, empresariales e incluso partidistas, de tal forma que muy pocas veces o casi nunca se sanciona a funcionarios y políticos que vienen del mismo partido gobernante, por el costo político que ello implica.

Responde: “Eso es muy importante: creo que el costo político (para el nuevo gobierno) sería más bien si no lo hacemos… Lo importante aquí es tener en consideración que el propio gobernador Alfonso Durazo ha dicho que está esperando a los primeros corruptos para poner en ellos el ejemplo para el resto del gobierno.

“No podemos poner en riesgo el apoyo de la gente a este proyecto político, sólo porque alguien se quiera exponer a meter la mano o la pata, porque todo tendrá consecuencias”.

Acepta Noriega que la Contraloría se ha dedicado históricamente a castigar a quien mete la pata y a personar a los que meten la mano, pero entiende que su función no será necesariamente la de perseguir sino de detectar, desarticular y desintegrar las posibles redes de corrupción.

CAMBIARÁN LEYES ANTICORRUPCIÓN

A Guillermo Noriega Esparza igual le recordé el viejo argumento de algunos contralores de que solamente pueden hacer lo permitido en las leyes que, ciertamente, parecen estar diseñadas para que en muy pocos casos los corruptos devuelvan el daño patrimonial causado al gobierno o vayan a la cárcel.

A esto responde que el marco legal será actualizado y que el gobernador Alfonso Durazo ha instruido realizar una gran reforma e incluso un cambio profundo a la Ley de Adquisiciones del Estado, porque la actual ley es tan laxa que la verdad “pueden hacer lo que se les pegue la gana y no pase nada”.

“Entonces, sí, por supuesto que estamos trabajando para poner orden en el marco normativo”.

SÍ SE INVESTIGARÁ EL PASADO

Durante este encuentro con el Contralor, le traje a cuento aquel socorrido argumento de muchos sexenios de que gobernarían con visión de futuro y “sin mirar por el espejo retrovisor”, una señal clara de que la corrupción del pasado no será investigada.

Noriega ataja: “yo creo que la historia nos ha enseñado, con el sexenio pasado, cómo Claudia Pavlovich llegó levantando expectativas sobre millones y millones que estaban perdidos, con una idea persecutoria en que incluso utilizó todas las instituciones en contra de sus opositores y eso nomás nos distrajo de la verdadera responsabilidad que era resolver problemas.

“Tuvo al Estado de Sonora y a los medios de comunicación, porque era políticamente muy rentable, el ir en contra de los corruptos, pero a la hora de la hora no lograron gran cosa y lo único que se terminó desgastando fue la confianza de la sociedad en sus instituciones.

“Aquí tenemos un chorro de problemas que resolver, pero eso no quiere decir que no vamos a revisar si hay (hubo) irresponsabilidades o hasta corrupción en el uso de los recursos, y si logramos integrar los expedientes, las investigaciones, la idea es hacerlo bien, sin aspavientos.”

El Contralor apunta que la misión del gobierno de Alfonso Durazo será la de “resolver una serie de problemas que aquejan a los sonorenses y que no se han podido resolver, mientras otros nos dedicaremos a escudriñar la actuación en anteriores gobiernos y, en su caso, deslindar responsabilidades, pero no en la lógica del escándalo político, porque no tiene caso”.

UNA CONTRALORÍA SIN RECURSOS

De todos es sabido que por más buenas intenciones que tenga un nuevo Contralor estatal, si en la propuesta del Poder Ejecutivo y en la aprobación de Poder Legislativo no se le dota de los recursos económicos que ahorita no tiene, entonces será señal de que la Contraloría estará en riesgo de seguir tal como ha estado.

Noriega dice que esa es una situación en análisis y concede que a la contraloría estatal de Sonora se le asignan mucho menos recursos que en el promedio nacional del resto de las entidades.

“A nivel nacional, el promedio de lo que se debe gastar en control interno es 1.5% del presupuesto del estado y en Sonora es del 0.6%”.

Dice pues que sí se necesita más para hacer un trabajo suficiente de control, pero que no se solucionará de la noche a la mañana, pues al mismo interior de la Contraloría hay mucho que hacer para optimizar los recursos.

Hasta allí lo más importante de esta que fue la primera entrevista concedida por el nuevo Contralor del Estado, a quien le expreso mi total convicción de que la imagen y el juicio sobre el nuevo gobierno estatal irán muy ligados a lo que se logre hacer desde la Contraloría General del Estado para detectar, investigar y sancionar la corrupción.

O realmente hay un cambio en la actitud del gobierno en torno al uso y cuidado de los recursos públicos, o la Contraloría se sigue ganando el mote de ser “La carabina de Ambrosio” de todos los gobiernos.

Para quien le interese, aquí compartimos el audio de la entrevista completa:

https://lahoja.mx/wp-content/uploads/2021/09/contralor.mp3?_=1
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